
En lo que fuera uno de los días más esperados por buena parte de la población peruana, la sentencia al ex mandatario fue transmitida por todos medios, tanto radiales como televisivos del Perú. La expectativa era grande pues, era sin duda el tema que tenía (tiene aún, y quizás tendrá) dividido al país ¿Era Fujimori culpable por delitos contra los derechos humanos, responsable mediato de la creación del denominado Grupo Colina y las futuras acciones clandestinas que costaron la vida a más de una treintena de personas? Eso era lo había que demostrar y en base a eso dar una sentencia condenatoria o por el contrario absolvente.
La Sentencia
Programada para el martes 7 de abril, fue muy criticada por el sector fujimorista quienes vieron en esta prontitud un mal indicio, argumentando que “para un proceso tan largo y tan importante, el tiempo para discutir la sentencia era muy corto”
La última sesión, el dictamen final de la sentencia condenó (después de una amplia exposición detallada de alrededor de tres horas) a 25 años de pena privativa de la libertad por delitos contra la humanidad a Alberto Fujimori Fujimori, lo que inmediatamente llevó al acusado a recurrir a su derecho a apelar la sentencia mediante el “recurso de nulidad”.

Según lo dicho líneas arriba, Fujimori saldría en libertad el 10 de febrero del 2032 pues se tiene en cuenta el tiempo que estuvo arrestado en Chile desde noviembre del 2005.
Opiniones

Los congresistas tampoco se quedaron atrás en dar su opinión acerca de este fallo, ciertamente histórico y que marca un precedente en la jurisprudencia peruana. Cabe mencionar que la mayoría de parlamentarios se mostraron de acuerdo con la pena de 25 años pero hubo uno que expresó su desaprobación sincera: Lourdes Alcorta, de Unidad Nacional.

Ha quedado demostrado que el tribunal presidido por César San Martín se portó a la altura de la situación, respetando a la defensa. Esto, lo reconocieron todos los bandos en cuestión, tanto la fiscalía, el fujimorismo, la clase política y la población en general. Sin embargo, cuando la sentencia se vio negativa a los intereses del fujimorismo, salieron en televisión (programas distintos pero a la misma hora, 11 de la noche) La hija del ex presidente y su abogado, César Nakasaki a decir que la sentencia estaba cargada de mucha venganza y saña, e incluso, que César San Martín guardaría rencores contra Fujimori dado que este fue removido de su cargo el nefasto 5 de abril de 1992, según afirma Keiko, por haber dado un Habeas Corpus a un presunto terrorista. POR FAVOR!!!!!
Diferencias
Pasado el juicio y la sentencia condenatoria, los fujimoristas apelarán al recurso de nulidad y será un nuevo tribunal quien ratifique, disminuya la condena o absuelva definitivamente a Alberto Fujimori.
En las calles, el sentimiento es contradictorio, mucho están de acuerdo con la pena, lo tildan de asesino, corrupto y los adjetivos por los que el Decenio Fujimorista ya es conocido; otros se muestran en contra aludiendo a hecho que fue “el Presidente” que nos liberó del terrorismo, que puso orden al país tras cinco años de desastroso gobierno aprista, generalmente. Y otros que tratan de ser intermedios diciendo que se merece la cárcel más no una pena tan drástica como la que ha recibido.
Jaime Bayly, un resuelto antifujimorista, declaró este último en su programa “El Francotirador” en una entrevista realizad a Keiko Fujimori que fue, efectivamente, su padre quien reorganizo económicamente al país para enrumbarlo a la estabilidad económica que ahora gozamos, añadiendo que fue aquél que terminó con la subversión de Sendero Luminoso y el MRTA.
Bayly tiene razón en lo que dice, y es que el legado de Fujimori, lo más visible, lo más óptimo es eso, sin embargo, la derrota de la subversión costó la vida impunemente de inocentes que ninguna vinculación tuvieron con el terrorismo. Más aún, la prosperidad económica nos valió en muchos sentidos la independencia de poderes tantos políticos como judiciales.
Por tal, el legado de Alberto Fujimori debe medirse no solo por lo bueno y lo malo, en tanto sea una síntesis de ambos factores pues, para muchos lo negativo nubla lo positivo en tanto que para otros lo positivo minimiza lo negativo.
Lo que se viene
Pero es que acaso ha terminado el primer juicio, falta todavía el proceso por los 15 millones de soles que dio Fujimori a Montesinos por el tiempo de servicios prestados, así como el caso por el allanamiento ilegal a la casa de Trinidad Becerra, esposa del ex asesor.

Como digo, esto es solo el comienzo, pues la batalla más grande está preparada para el 2011, allí veremos si los semillas que ahora intentan sembrar darán sus frutos. Por el bien del país, esperemos que no.